Hoy comentaremos una bellísima producción que fue lanzada el año 2009 y que, sin temor a equivocarme puedo asegurarles que está muy bien lograda. Me refiero al filme BAKHITA que nos muestra con particular detalle y cuidado esmero, la singular vida de esta mujer sudanesa que conoció el sufrimiento, la opresión, la injusticia y la burla a la que fue sometida como esclava que era. Pero ninguno de estos males que desfiguran la dignidad de la persona humana, pudo finalmente destruirla y esto porque "un Amo", diferente a todos los demás amos, hizo algo extraordinario por ella" confirmando que su nombre, Bakhita, que significa AFORTUNADA, correspondiera del todo a su vocación.
JOSEFINA BAKHITA, UN SER DE AMOR
No hay nada en la vida de un ser humano que no dependa del Amor. Véase por donde se vea, el ser humano es una criatura totalmente dependiente del amor y en búsqueda de él para conseguir configurar la propia existencia al fin para la cual se le dio.
Este es un caso extremo, por cierto no es único y se muestra en representación dé las muchísimas personas que a través de la historia fueron esclavizadas y como la adversidad no suprime completamente la capacidad de elegir, se puede siempre elegir y elegir bien. Bakhita muestra con su fuerte testimonio cómo, ni siquiera el estado de esclavitud puede violar la libertad interior de la persona humana.
Bakhita vivía en una comunidad tribal en el África, más precisamente en el Sudán y desde su infancia conoció el dolor. Su pueblecito fue invadido por unos mercaderes musulmanes de esclavos quienes obraron destrucción y matanza antes de capturar algunos "ejemplares" para nutrir su patético comercio.
En dicha ocasión, su madre fue salvajemente asesinada y ella junto a otros más fueron capturados, encadenados y conducidos hacia un lugar alejado donde tendría lugar la subasta al mejor postor. Este hecho marca el inicio de su Calvario. Bakhita será "adquirida" como esclava a lo largo de su vida por diferentes amos, uno más cruel que el otro, quedando ello marcado no solo en su alma sino también en su cuerpo. Antes que estos eventos se desencadenaran, el sabio anciano de la tribu le mostraba que sobre ella reposaba una bendición divina...
"Tu eres un ser extraordinario".
Diría un sabio y cerebral occidental: ¿cómo un viejo nativo de una tribu recóndita y sumida en el retraso podría hacer tal diagnóstico reservado a un psicoanalista o por lo menos a un buen psicólogo...? La sencillez del corazón otorga al alma la suficiente lucidez para descubrir el Bien en el otro. No es casualidad entonces que los sencillos de corazón tengan su lugar en la proclamación que Jesucristo hace de las Bienaventuranzas.
Federico Marín, prospero comerciante veneciano irrumpe en la vida de Bakhita en un momento trágico. Es así que la Providencia obra de modo inescrutable pero efectivo.
EL PERDÓN ES LA MAYOR EXPRESIÓN DE LA LIBERTAD
Posiblemente el momento más claro en el que se dejó ver cuan cierto era el diagnóstico hecho por el anciano jefe tribal, fue cuando Josefina Bakhita declara lo siguiente:
"Si volviese a encontrar a aquellos negreros que me raptaron y torturaron, me arrodillaría para besar sus manos porque, si no hubiese sucedido esto, ahora no sería cristiana y religiosa".
Las palabras anteriores no pueden provenir de los labios de aquel que tiene el alma lacerada por la vejación y el desprecio desfigurarte de cualquier atisbo de dignidad personal.
Por ejemplo, en la historia de "Raíces", que narra la cruenta esclavitud de los negros llegados a Norteamérica, tenemos la rebeldía del personaje principal llamado "Kunta-kinte". Defender su verdadero nombre era lo único que le quedaba a ese esclavo. Sin embargo, el hacerlo exigía de su propio corazón un pago que no era sino lo contrario al amor: el odio al amo, al enemigo. Y eso hace que el esclavo sea doblemente esclavo, porque no podrá encontrar ninguna forma de libertad ya que está atado a la venganza, a la necesidad de "que me paguen lo que me deben", y eso no es sino la falta de perdón que enferma al cuerpo y al alma.
En contra parte, Josefina Bakhita fue capaz de perdonar a los que la humillaron infinitamente tratándola peor que un animal, y eso hasta el punto de encarnar literalmente el amor a los enemigos del que nos habla Jesús en el Evangelio.
¿Cómo fue capaz de perdonar a sus asesinos en vida...?
La verdad es que ella. como ningún ser humano que haya vivido sobre la faz de la tierra, tiene ni remotamente capacidad mayor a este respecto. Fue otro, uno más Grande que ella, fue Jesucristo, este "Buen Amo" que no solo la libertó sino que le dio la longanimidad de la cual solo son capaces aquellos otros Cristos, es decir, los santos.
Efectivamente hermana Bakhita...
¡ Tu eres un ser extraordinario!
¡NUESTRA ESPERANZA ES CIERTA!
Cuando su Santidad Benedicto XVI vio este filme dijo que era una bellísima película que correspondía al testimonio de la santa patrona del Sudán.
Benedicto XVI entregó a la Iglesia una Encíclica que resulta fundamental para rescatar y dar un sentido profundo a las razones por las cuales los creyentes tenemos la fe como un tesoro.
En la encíclica Spe Salvi, Salvados en la Esperanza, el Santo Padre nos recuerda cómo nuestra esperanza es cierta. Efectivamente, los seres humanos podemos atesorar grandes esperanzas respecto a cosas, hechos, pero por sobre todo personas. Sin embargo todas estas esperanzas carecen de certeza.
Desde lo más banal a lo más importante no podemos decir de la esperanza que esta es cierta. La excepción de ello es la Fe.
Un hombre compra un billete de lotería y tiene la esperanza que se sacará el premio mayor. Una posibilidad en 27 millones de que acierte. Un joven enamorado declara su amor a su amada. lo hace con la esperanza del sí... algunos habrán hecho seguramente alguna vez la dolorosa - en términos afectivos - experiencia de un no como respuesta.
Un padre espera que sus hijos sean buenos y triunfen. Es una legítima esperanza pero no por ello posee la fuerza inquebrantable de la certeza.
La fe en Jesucristo y en el Amor del Padre es la ÚNICA esperanza inquebrantable y eso porque "si somos infieles, Dios permanece fiel", dice san Pablo.
Sabemos que las promesas de Dios, una por una, todas se cumplirán.
La promesa de Dios no es solamente para un futuro que algunos imaginan lejano. ¡No!, las Promesas de Dios son para este instante. Su Amor es para ahora, para hoy. El nos abraza y nos cierra contra Sí y a Dios "se le va la Vida en ello", literalmente deja la Vida sobre una Cruz, por ti y por mí. Siendo Rey se hizo como un esclavo y pasó confundido en la multitud, incluso fue confundido con los malechores...
Nosotros los cristianos corremos un riesgo y es el de "estar vacunados contra Dios". Me explico:
Escuchamos que Dios nos ama, que El nos hace Misericordia, que somos preciosos para El... oímos y oímos esas y otras cosas más y seguimos oyendo más mucha veces no escuchando. A fuerza de oír hemos desarrollado una peligrosa "inmunidad" contra la Gracia.
¿Cómo saber si yo padezco de esta mala inmunidad...? El test es sencillo. Simplemente pregúntate
Si eres "inmune" verás que tu esperanza no es tal, simple y llanamente porque vives como si no la tuvieras, porque vives lo cotidiano como si no fueras un hijo de Dios, porque te sumes en la tristeza cuando el que ha vencido a la muerte, la más grande derrota de los hombres, pasa a tu lado y dices no conocerle o si acaso ni le miras porque estás encerrado en tu prueba o tu dolor.
Eres víctima de esta indiferencia espiritual cuando vives esta vida como si la Resurrección de la carne y la vida Eterna no estuvieran allí, aguardándote.
No tenemos rostros de resucitados, no vivimos en la tensión del amor y luego nos preguntamos por qué estamos tristes. Y por eso el Señor pregunta:
"Pero cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará fe sobre la tierra?"
Santa Josefina Bakhita viene a liberarnos de esta modorra espiritual. Ella nos hace reaccionar con su tetimonio...
"...Supe que había un Amo, Señor de todos los demás amos de la tierra y que era Bueno. El es el único amo que tomó mi lugar de castigo, El tomó mi lugar para que yo sea feliz y libre..."
“Nunca es demasiado tarde para tocar el corazón del otro y nunca es inútil”, escribe su Santidad Benedicto XVI, al final de le Encíclica.
En el capitulo 48 de la Encíclica Spe Salvi dice: “y Nadie vive solo. Ninguno peca solo. Nadie se salva solo. En mi vida entra continuamente la de los otros: en lo que pienso, digo, me ocupo o hago. Y viceversa, mi vida entra en la vida de los demás, tanto en el bien como en el mal……. Nuestra esperanza es siempre y esencialmente también esperanza para los otros; sólo así es realmente esperanza también para mí. Como cristianos, nunca deberíamos preguntarnos solamente: ¿Cómo puedo salvarme yo mismo? Deberíamos preguntarnos también: ¿Qué puedo hacer para que otros se salven y para que surja también para ellos la estrella de la esperanza? Entonces habré hecho el máximo también por mi salvación personal.”
“3. Pero ahora se plantea la pregunta: ¿en qué consiste esta esperanza que, en cuanto esperanza, es -- redención --? Pues bien, el núcleo de la respuesta se da en el pasaje antes citado de la Carta a los Efesios: antes del encuentro con Cristo, los Efesios estaban sin esperanza, porque estaban en el mundo --- sin Dios --. Llegar a conocer a Dios, al Dios verdadero, eso es lo que significa recibir esperanza. Para nosotros, que vivimos desde siempre con el concepto cristiano de Dios y nos hemos acostumbrado a él, el tener esperanza, que proviene del encuentro real con este Dios, resulta ya casi imperceptible. El ejemplo de una santa de nuestro tiempo puede en cierta medida ayudarnos a entender lo que significa encontrar por primera vez y realmente a este Dios. Me refiero a la africana Josefina Bakhita, canonizada por el Papa Juan Pablo II. Nació aproximadamente en 1869 –ni ella misma sabía la fecha exacta– en Darfur, Sudán. Cuando tenía nueve años fue secuestrada por traficantes de esclavos, golpeada y vendida cinco veces en los mercados de Sudán. Terminó como esclava al servicio de la madre y la mujer de un general, donde cada día era azotada hasta sangrar; como consecuencia de ello le quedaron 144 cicatrices para el resto de su vida. Por fin, en 1882 fue comprada por un mercader italiano para el cónsul italiano Callisto Legnani que, ante el avance de los mahdistas, volvió a Italia. Aquí, después de los terribles -- dueños -- de los que había sido propiedad hasta aquel momento, Bakhita llegó a conocer un -- dueño -- totalmente diferente –que llamó -- paron -- en el dialecto veneciano que ahora había aprendido–, al Dios vivo, el Dios de Jesucristo. Hasta aquel momento sólo había conocido dueños que la despreciaban y maltrataban o, en el mejor de los casos, la consideraban una esclava útil. Ahora, por el contrario, oía decir que había un -- Paron -- por encima de todos los dueños, el Señor de todos los señores, y que este Señor es bueno, la bondad en persona. Se enteró de que este Señor también la conocía, que la había creado también a ella; más aún, que la quería. También ella era amada, y precisamente por el « Paron » supremo, ante el cual todos los demás no son más que míseros siervos. Ella era conocida y amada, y era esperada. Incluso más: este Dueño había afrontado personalmente el destino de ser maltratado y ahora la esperaba -- a la derecha de Dios Padre --. En este momento tuvo -- esperanza --; no sólo la pequeña esperanza de encontrar dueños menos crueles, sino la gran esperanza: yo soy definitivamente amada, suceda lo que suceda; este gran Amor me espera. Por eso mi vida es hermosa. A través del conocimiento de esta esperanza ella fue -- redimida », ya no se sentía esclava, sino hija libre de Dios. Entendió lo que Pablo quería decir cuando recordó a los Efesios que antes estaban en el mundo sin esperanza y sin Dios; sin esperanza porque estaban sin Dios. Así, cuando se quiso devolverla a Sudán, Bakhita se negó; no estaba dispuesta a que la separaran de nuevo de su -- Paron --. El 9 de enero de 1890 recibió el Bautismo, la Confirmación y la primera Comunión de manos del Patriarca de Venecia. El 8 de diciembre de 1896 hizo los votos en Verona, en la Congregación de las hermanas Canosianas, y desde entonces –junto con sus labores en la sacristía y en la portería del claustro– intentó sobre todo, en varios viajes por Italia, exhortar a la misión: sentía el deber de extender la liberación que había recibido mediante el encuentro con el Dios de Jesucristo; que la debían recibir otros, el mayor número posible de personas. La esperanza que en ella había nacido y la había -- redimido -- no podía guardársela para sí sola; esta esperanza debía llegar a muchos, llegar a todos.”
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SINÓPSIS
BAKHITA Hermosa película que nos relata con detenimiento la heróica vida de esta santa sudanesa quien fuera canonizada el año 2000 por el Papa Juan Pablo II.
Josefina BAKHITA fue esclavizada desde la tierna infancia, pasó por las manos de diferentes amos quienes le infligieron los más horrendos sufrimientos, hasta que finalmente, un rico comerciante italiano la compra como esclava y la lleva a Italia para que se ocupe de la crianza de su hija enferma y los servicios domésticos.
Esta humilde mujer encontrará con la ayuda de un sacerdote de pueblo, algo que transformó completamente su dolorosa existencia. Supo que había un Amo que era diferente a los demás. Era el Amo de todos los amos y había dado su vida para rescatar a sus subditos. Backita conoció a Jesucristo quien se revelará como su Señor y libertador, no solo de la vida de esclavitud sino como Aquel quien da un nuevo sentido al vivir de cualquier persona.
Josefina BAKHITA fue esclavizada desde la tierna infancia, pasó por las manos de diferentes amos quienes le infligieron los más horrendos sufrimientos, hasta que finalmente, un rico comerciante italiano la compra como esclava y la lleva a Italia para que se ocupe de la crianza de su hija enferma y los servicios domésticos.
Esta humilde mujer encontrará con la ayuda de un sacerdote de pueblo, algo que transformó completamente su dolorosa existencia. Supo que había un Amo que era diferente a los demás. Era el Amo de todos los amos y había dado su vida para rescatar a sus subditos. Backita conoció a Jesucristo quien se revelará como su Señor y libertador, no solo de la vida de esclavitud sino como Aquel quien da un nuevo sentido al vivir de cualquier persona.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS
Título original: Bakhita
Título en Español: Bakhita, de esclava a santa
País: Italia
Año: 2009
Duración: 200 minutos
Dirección: Giacomo Campiotti
Música: Stefano Lentini
Fotografía: Blasco Gurato
Actuaciones de:
Fatou Kine Boye, Teresa Acerbis,
Stefania Rocca, Ettore Bassi,
Sonia Bergamasco, Ludovico Fremont,
Maria Grazia Bon, Francesco Salvi,
Giullia Gorietti, Nathalie Rapti Gomez,
Stefano Fregni, Natalia Piatti
y Alberto Molinari.
Idiomas: Español e Italiano
Subtítulos: Español
Menú Principal y de Escenas
Menú de Idiomas y Extras
Formato: DVD
Región: ALL
Sistema NTSC
Información actualizada el 08 de febrero del 2018, fiesta de esta pequeña y a la vez inmensa santa.
No olvidemos de pedir por su intercesión por todas las víctimas de la esclavitud moderna cual es la trata de personas en diferentes lugares del mundo.
Hoy viernes Santo vi la película en canal 7 de costa rica , si es muy bonita, lógico que no esta 100% apegada a la realidad, pero deja un mensaje de esperanza y perdón que hace que valga verla
ResponderEliminaryo también la vi en CR. muy buen mensaje
EliminarEfectivamente Marcos, es muy bella película y mejor historia. Creo que los productores no la "apegaron 100% a la realidad" porque de lo contrario sería una historia mucho más violenta. Santa Josefina bakhita sufrió lo indecible. pasó por muchos más "amos" que los que salen en el filme y el trato que recibió fue terrible.
ResponderEliminarEn cuanto a los hechos singulares del filme todos se apegan a la historia de la santa y porsupuesto muchos más se han omitido por cuestión de tiempo, a pesar que es un telefilme bastante largo.
¡Felices Pascuas de Resurrección!
gracias por este gran aporte
ResponderEliminarPura vida,Gracias por el aporte
ResponderEliminargracias de nuevo
ResponderEliminarviajando a una peregrinacion a Salta miramos esta pelicula, que hermoso testimonio de fe. Gracias a las cordinadoras por compartirla. Claro que vale la pena verla.
ResponderEliminarMe gustó la pelicula,pero es por el amor y la dulzura de BAKHITA,no hay qué ir más haya,no hace falta ensalzarla,a ella seguro qué con lo humilde qué era,no le gustaria.fue util ala gente es lo importante,solo dios le dará su recompensa.
ResponderEliminarno me puedo creer qé haya censura! jajajajja y no publoqen mi comentario!
ResponderEliminarEstimado anónimo, no es la censura, es el tiempo que no siempre alcanza para moderar.
ResponderEliminarGracias por tu opinion
La Iglesia ensalza a los hombres y mujeres que vivieron como discípulos e imitadores de Cristo. Lo hace concretamente cuando reconoce que han obtenido la victoria en Cristo y por ello podemos
estar seguros que están en el cielo. Esos son los santos y Josefina Bakhita es una santa. ¿Por que subrayar esto? Porque nosotros seguramente encontraremos en su testimonio las virtudes que debemos imitar para corresponder a nuestra vocación de hijos de Dios y
también llamados a la santidad.
Donde puedo comprar la película, vivo en la ciudad de Puebla, Mexico
ResponderEliminarDonde puedo comprar la película vivo en Puebla México. Gracias
ResponderEliminarHola Verónica, pienso que la puedes encontrar en alguna librería Católica como San Pablo (Paulinas)
Eliminarcual era el dolor vivbido desd el mido en esdta pelicula
ResponderEliminarEl dolor es propio de la condición humana. Más allá del dolor está el sufrimiento que tiene una connotación más espiritual. El miedo aparece frente aquello que no conocemos y la angustia es este sentimiento desagradable que no depende de nuestra voluntad pero que sirve para atravesar la dificultad o retroceder.
EliminarLos santos, seres humanos como nosotros, no recibieron un don por parte de Dios que les permitiera hacer la economía de los miedos, los sufrimientos y las angustias humanas. La sola diferencia es que ellos escogieron abrazar al Crucificado y vivir eso ordinario de manera extraordinaria. Esto último sí que es un don y todos estamos convidados por la Gracia de Dios para hacer igual pero desde nuestra propia historia :)
Hermosa película, estoy de acuerdo en lo que dijo Anonimo
ResponderEliminarMuy buena la info!
ResponderEliminarme pueden decir las caracteristicas de Bakhita y de Aurora, por favor
¿Qué características de la Persona humana no estaba desarrollando Bakhita? ¿Por qué?
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